TEZONTLE Y TEPETATE

TEZONTLE Y TEPETATE: CARACTERÍSTICAS

El tezontle es una roca de origen volcánico cuyo uso y aplicación en la construcción tuvo su mayor auge durante la época colonial en la Ciudad de México. Ejemplos de la vasta arquitectura desarrollada con base en este material se pueden encontrar en la Catedral Metropolitana y en el Palacio Nacional.

En la actualidad, se utiliza el tezontle para diversos trabajos de albañilería, entre ellos los acabados de las fachada de algunas casas. Siendo un material gravoso, su textura es tal cuando se emplea de esta manera, que da una sensación de antigüedad, sin por ello generar la idea de que la casa sea vieja o esté descuidad. Por el contrario, proporciona un aire campestre que contrasta con la mayoría de los acabados en las zonas urbanas.

Como producto de la actividad volcánica, el tezontle es bastante duro y resistente, a pesar de ser una piedra porosa. Su resistencia lo hace un material ideal para el relleno de caminos de terracería. También es un material ligero; su densidad varía entre 1.2 y 1.6 gramos por centímetro cuadrado.
Otra de sus características es que acumula el calor, por lo que comúnmente se le utiliza en la construcción de hornos para pan y otro tipo de alimentos que requieren de altas temperaturas acumuladas. El color característico del tezontle es el negro, aunque también se le puede encontrar con matices rojizos y amarillentos e incluso anaranjados.

Recientemente, su porosidad lo ha convertido en una opción para aquellas personas dedicadas a la jardinería, debido a que no permite la filtración de agua. Las innovaciones en diseño de parques y jardines lo consideran un material útil y agradable a la vista.

Por otra parte, otro material que con frecuencia se utiliza a la par o como sustituto del tezontle es el tepetate. Se trata de un tipo de arena o gravilla granulosa que puede encontrarse en zonas donde la arcilla natural es abundante. Obtenerlo es sencillo; debido a que es ligero, puede ser extraído únicamente con la ayuda de pala y pico.

Gracias a su ligereza, es estupendo como relleno entre pisos cuando se emplea en la construcción de edificios, pero también como relleno y soporte adicional de muros. Es posible emplearlo en grandes cantidades ya que la facilidad de su extracción y a que puede hallarse en abundantes cantidades es un material muy barato.

Una ventaja que tiene el tepetate sobre el tezontle es que no sólo guarda el calor sino que también es aislante. Por esta razón es frecuente encontrarlo como material básico en la construcción de ladrillos en lugares donde los climas son extremos, tanto en el frío como en el calor.