ARQUITECTURA
PREHISPÁNICA CDMX
La
ciudad prehispánica posee tres zonas bien diferenciadas:
1. El centro ceremonial, que alberga los templos, las estructuras del
juego de pelota, los palacios de los sacerdotes y de los jerarcas.
2. Una zona de palacios y residencias de personajes importantes
relacionada con un cementerio formada por tumbas y entierros.
3. La zona habitacional de pueblo.
Elementos
espaciales fundamentales :
Los elementos que conforman la arquitectura prehispánica en CDMX son:
a)La plaza: son cuadradas o rectangulares delimitadas por plataformas
o basamentos y sirven de eje para organizar los recintos y edificios.
b) Edificios: son de diversos tipos civil, funerario, habitacional y
religioso, siendo este último el mas importante, los templos se localizan sobre
elevadas plataformas.
Características
Urbanas
Circulación peatonal, integración con la naturaleza (predominio de
grandes espacios abiertos), en base a ejes de orientación (preferentemente el
sol), de base geométrica con cuadrángulos o líneas rectoras, diversos niveles
con plataformas, sobreposición de elementos.
Materiales
de construcción: Madera, piedra, carrizo, lodo, barro o arcilla
y algunos forrajes. La madera la utilizaron para sostener techumbres, en dinteles
y como armado de muros. El adobe se utilizó para construir muros y como núcleo
de basamentos. La cal se utilizó en decorados y como aglutinante en morteros:
La paja y ramas de palma como techo. La piedra se utilizó para construir muros
de contención para plataformas, escalinatas, ángulos y arranque de muros,
paredes, columnas, pilares, dinteles y cresterías.
Sistema
ornamental. La arquitectura es el punto de integración de
la pintura y la escultura, la ornamentación prehispánica mas que un decorado es
simbólica, medio para transmitir ideas religiosas, se divide en naturista y
geométrica. Encontramos labrados en piedra en alto y bajorrelieve
principalmente en tableros, columnas jambas, dinteles, frisos, cresterías,
cornisas y en la parte superior de los paramentos; también encontramos murales
coloridos; moldeados en estuco y escultura exenta y adosada. (monumental y a
escala del hombre).
Forma. Tenemos tres
formas geométricas básicas: el cuadrado con su consecuente rectángulo, el
triángulo y el círculo. El círculo no es la forma dominante, se uso
primeramente para plataformas o basamentos. Tenemos templos y edificaciones de
planta circular, las formaciones circulares están también en las secciones de
columnas o grandes esculturas. El triángulo predomina en las techumbres cónicas
o piramidales de jacales o cresterías. Un segundo elemento triangular es el
basamento, cuando tiene forma de talud, de forma triangular son también algunos
remates de tableros y cornisas. El cuadrado y el rectángulo fueron las formas
mas utilizadas en el mundo prehispánico. Tanto la traza urbana, la planta de
centros ceremoniales y espacios urbanos, como las plantas de palacios,
basamentos, templos y viviendas se basaron en estas formas. En general las
fachadas de palacios y templos presentan la forma rectangular.
Ornamentación La
ornamentación se basa principalmente en animales (zoomórfica) como: jaguar,
monos, serpientes, lagartos, guacamayas, ranas, conejos, coyotes, águilas,
perros, venados, murciélagos, zopilotes, lechuzas, caracoles, conchas, abejas y
mariposas. La ornamentación de orden vegetal también es importante como:
árboles y flores, maíz y otros frutos. La ornamentación antropomórfica
representa principalmente a sacerdotes, guerreros o gobernantes en mascarones,
aunque también hay relieves representando escenarios o pasajes específicos como
combates, sacrificios, adoraciones o situaciones de la vida urbana. La
ornamentación mitológica o fantástica también es usual sobre todo ligada a la
religión, realizan combinaciones de animal- animal, animal-hombre,
animal-planta o combinación de fenómenos naturales. Los fenómenos naturales y
el medio natural también son modelos de ornamentación como elementos acuíferos,
lluvia, montañas, volcanes, el sol y la luna, estrellas y el fuego. Por último
esta la ornamentación geométrica de tipo abstracto como grecas, junquillos,
tamborcillos y celosías.
Color Los colores
preparados con pigmentos vegetales, minerales o animales eran aplicados al
fresco sobre un aplanado de estuco o cal previamente colocado. Predominaban el
rojo y el azul, pero también usaron verde, amarillo y tonos de ocre. El color
invadía sobre todo los templos, tanto interior como exterior, aunque se
manifestaba en tableros, dinteles, jambas, cresterías, alfardas, taludes,
cerramientos, escaleras, pisos, frisos, cornisas, columnas y esculturas de todo
edificio. Tanto los colores, como los murales pictóricos, sirvieron para
jerarquizar visual, espacial, social y funcionalmente a cada edificio y a cada
parte de él, además de poseer una función lingüística por la significación
simbólica en la propagación del conocimiento religioso. Textura Podemos
encontrar dos tipos de textura; una pulimentada o lisa, que se daba a los
basamentos, tableros, muros, columnas e inclusive a los relieves y esculturas,
en donde los elementos se bruñían con guijarros o piedras porosas; la otra
rugosa o rústica, en donde los materiales se dejaban al natural y no se pulían.
Sin embargo la volumetría de altos y bajorrelieves dio una variedad en los
acabados de los edificios, proporcionando a los edificios una gama de luces,
sombras, profundidades, perfiles; así como ritmo, jerarquía y remates visuales.
La arquitectura azteca refleja
los valores y la civilización de un imperio, y estudiar la arquitectura azteca
es fundamental para entender la historia de los aztecas, incluyendo su
migración de un lado a otro de México y su nueva representación de rituales
religiosos. La mejor manera de describir a la arquitectura azteca es como
monumental. Su propósito era el de manifestar poder, y al mismo tiempo
adherirse a fuertes creencias religiosas. Esto se hace evidente en el diseño de
sus templos, adoratorios, palacios, y casas para las gentes del pueblo.
Los aztecas estaban bien organizados y
contaban con una fuerte infraestructura y sistemas que movilizaban gentes y
recursos materiales con el objetivo de construir grandes edificios que
satisficieran las necesidades de sus pobladores. Tenochtitlán, la ciudad
capital, simbolizaba el poder azteca. La arquitectura azteca, que era similar a
la de otras culturas mesoamericanas, poseía un innato sentido del orden y de la
simetría. Los diseños geométricos y las líneas extensas eran representaciones
de dogmas religiosos y del poder del Estado. Además, los aztecas usaron
bajorrelieves, muros, plazas y plataformas como medios con los cuales
representar a sus dioses e ideales. Durante las distintas épocas del imperio,
los aztecas agregaron nuevas técnicas y materiales a sus estructuras. Ejemplos
de la monumentalidad y grandeza de los aztecas se hacen evidentes en el Templo
Mayor, cuya plaza podía dar cabida a 8,000 personas, y en el mercado de
Tlatelolco, que podía albergar a 20,000 personas en los días de mercado.